Chihuahua, Chih.- Las declaraciones sobre los migrantes vertidas por la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, fueron tachadas de clasistas, discriminatorias y xenófobas, además de anticonstitucionales y anti derechos humanos.
María Eugenia Campos declaró que, “Primero recordarles a los migrantes que el estado de Chihuahua no es un santuario para ellos, les pedimos que recapaciten y no vengan al estado de Chihuahua”.
Agregando, “que reconozcan también la situación que está viviendo la frontera con Estados Unidos, que se cerraron las fronteras, se cerró los programas que había para migrantes, el CBP One”.
Las palabras de la gobernadora se realizaron tras un accidente en la carretera Gómez Palacio-Jiménez en el que murieron seis migrantes que, aparentemente, intentaban cruzar la frontera de manera ilegal.
Por ello, colectivos promigrantes, activistas de derechos humanos, y actores políticos criticaron su postura pues, “criminaliza a quienes buscan seguridad o mejores condiciones de vida”.
La diputada Jael Arguelles dijo, “Maru deja claro su clasismo y racismo, así trata la gobernadora panista, a las personas migrantes: con desprecio y xenofobia desde el poder”.

Le urge a MECG que seamos una colonia gringa! así es ella, rubia y de buenos principios. No importa los derechos humanos, no importa la violencia en la Sierra Tarahumara, no importa los grupos delictivos que se presentan en diferentes puntos de los municipios de Chihuahua. Lo que importa es hacer leña del árbol caído. Al pueblo, pan y circo, el maquillaje perfecto, la cirujía, que aunque no quede bien, esa es la importante. Una imagen distorcionada y el reflejo de cómo está el estado grande…
La ignorancia y el recismo en el poder, es un peligro para México.